Hola amigos. Realmente tenía en mente una entrada más alegre para compartir, pero me ganó esta que es más triste...
El viernes por la mañana me entero por un mensaje de mi padre, que mi nona Lucía , su madre, estaba mal y entraba al quirófano. A lo cual mi asombro, pués hacía un tiempo que venía con un tema por una quebradura de cadera y detalles que harían muy largo el relato, pero no sabía que había pasado. Bueno, una infección que le valió perder la pierna y terminar en terapia intensiva en el hospital zonal. Pasé por enojo, bronca, tristeza...El viernes cuando la vi estaba dormida, prendida a un respirador. Cuando le hablaba movía los ojos y agitaba su respiración , esto me dio la pauta que me escuchaba. Prometí volver y asi fue. Seguía dormida. Después de la primera visita, me quedé pensando...¿Realmente se quiere despertar?¿No estaremos obligándola a estar entre nosostros y ella quiere irse? Asi que en mi ultima visita le dije: bueno noni, si queres despertate y charlamos, sino , si querés seguir durmiendo hacelo...Hace lo que tengas ganas, nosotros te vamos a enteder... Y asi me fui....A sabiendas que quizas ya no despertaría.
Hoy me levanté con la rara sensación de que se despedía. No sé bien lo que soñé, pero tuve la clara sensación que se iba. Me levanté triste, pero tranquila. Por la tarde tuve sesión con mi musicoterapeuta. Hablamos sobre esta sensación y el la primera improvisación, las notas se conviertieron en lágrimas y las lágrimas en notas. Luego hicimos otra. Me despedí a la distancia...Pude soltar en el sonido lo que no podía en palabras y me quedé tranquila. Como dijo me terapéuta: tu nona se merece estas lágrimas....
Horas después me confirman la noticia.
No voy a repetir lo que ya dije acerca de la vida y la muerte. Voy a agregar algo que saqué de mis últimas vivencias y mi reflexión sobre estas esta semana: a veces hay que aceptar que no podemos con todo, que hay que dejar ir. Lo que la muerte nos enseña es lo que vale la vida y está en nosotros elegir como queremos vivir y como morir.
Noni: ahora podes irte con el nono, a quien tanto extrabas. Te extrañaremos...
Hasta la próxima, amigos...Salutti.
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