jueves, 29 de noviembre de 2012

Crónica de mi primer subida a la autopista.

Hola amigos!
Como saben, tengo un temita con el manejo. Pasé de ser la típica que nunca iba a manejar  a tener mi auto, mi licencia de conductor y luchar con el miedo. Después de sufrir varios ataques, que se los podría calificar de ataques de pánico para enterlo mejor, mis expectativas de poder conducir sobre una autopista estaban bien lejana. Los que me han llevado en sus autos saben de los que les hablo. Mis manifestaciones del miedo son de diferentes matices: respirar hondo,  anunciar la presencia de otro auto, la maniobra que va a hacer, si frena o no, doy órdenes como frena, pará, y la típica "cuidado". No voy a describir nuevamente las horribles sensaciones que sentí, pero la autopista siempre fue mi "cuco" automovilístico.
Bien, luego de unos años de terapia verbal y unos meses de musicoterapia analítica, el sábado primera vez en mi vida, me subí a la autopista. Ya había hecho tres o cuatro viajes de Jauregui a Olivera, unos 5Km, por autopista, pero a esa altura pasa un auto cada 20 minutos, así que no cuenta. Igual, la primera vez se me durmieron los miembros superiores e inferiores mientras manejaba, por eso repetir la experiencia me llevo varias semanas. 
El sábado, teníamos un casamiento en San Justo, a cuadra y media de Camino de Cintura. Me programé y, con la ayuda y el apoyo de Ro, decidimos ir por la autopista. Así que nos subimos acá en Caballito, pasamos a la Ricchieri y bajamos en camino de Cintura. Otro desafío: lleno de camiones, colectivos y pozos!Para no olvidar que en provincia, y más en esos lados (al costado de la villa), la gente pasa los semáforos en cualquier color. 
Cuando me subo a la autopista no pude evitar que se me piante un lagrimón. No lo podía creer! Por primera vez no le tenía miedo a la autopista. Los autos me pasaban cerca, algunos más rápidos que otros, pude subir y bajar sin problemas. Y yo estaba ahí, abriéndome camino. Le decía a Ro, que se había preocupado cuando me puse a llorar pensando que se venía otro ataque,  hoy es un hito en mi vida. 
Fiel a mi estilo, me mandé las mías. Las cabinas de peaje: primer obstáculo esas benditas barras plásticas que te obligan a detenerte. Todo bien para los que vienen como locos, pero para esta pobre inexperta un problemón! Se me paraba el auto porque tenía miedo de "caer" de la barra y chocarme al de adelante. Pero enseguida lo solucioné dejando que el auto de adelante se alejara un poco para pasar por las barritas. Segundo obstáculo, mi brazo y el del empleado de la cabina no llegaban a encontrarse. Si, Ro me dijo, acercate y yo pensé que estaba cerca, pero no. En ese momento desee tener el brazo extensible del Inspector Gadget! Para colmo, te dan monedas de vuelto, lo único que me faltaba, tener que bajar a juntar monedas! Para la vuelta, me acerqué más y listo.
Al otro día, ya más canchera, me fui con Ro y un compañero de la orquesta a San Fernando. Una hora de viaje y esta vez subí a Panamericana! Siii, señores, la piba se subió a la Panamericana. En el medio cargamos nafta. Otra vez las distancias. No sé ni de que lado tiene la boca para la nafta, un papelón. Lo acomodé bien, le pido la nafta al empleado, pero no le daba la llave, que gila. Menos mal que el flaco era macanudo, me miró sonriente y me dijo: la llave, a la par que me hacía cara como de ¿si no como hago?. Como esta vez estaba más canchera, 24hs de cancha, jajjaja, me di el lujo de ir a 80Km/hs por el carril de 120Km/hs, pero también sobrepasé un auto, y me corrí tres carriles a la derecha! 
De estacionar ni hablemos! Aprendi a estacionar en 180º y en 45º de cola y de frente, pero con cono no con autos reales. Así que cuando tengo autos muy cerca me da miedo chocarlos y me cuesta un perú! Ro se pone loco! Se me para 80 veces porque en el afan de no chocar a los demás, piso poco el acelerador. 25 maniobras para que no quede ni a 180º ni a 45º sino que a 20º y a 30cm del cordón. Bueno, no importa, ya iré solucionándolo o lo dejaré donde tenga media cuadra para mi sola. 
La gente que maneja que fijó la cantidad de acciones y estímulos a los que tiene que atender? Los espejos, tres como si fuera poco, el pie derecho y el izquierdo que trabajan juntos, la palanca de cambio en una mano, las luces en la otra, la baliza. (Si, soy fans de la baliza,pero el tema es que mi auto la tiene arriba del volante entonces siempre me enriedo para prenderla). Le sumamos los cálculos de distancia y velocidad? Bien, muchas cosas, que cuando uno va adquiriendo experiencia se van haciendo mecánicas, pero en mi caso, maso maso. El bueno de Ro, también pretendía que escuchara el GPS, no , mi amor, mejor escuchalo vos y anda diciendomé.
El próximo desafío es ir a Luján. Pero tranqui, les voy avisando cuando salgo así se quedan en sus casas a salvo.
Hasta la próxima, saludos, Daniela.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Cronicas del trato a las minorías!

Hola amigos! Esta semana, a raíz de algunos eventos, estuve reflexionando sobre el trato, y en algunos casos, mal trato que se le da a las minorías. Mucha igualdad de género, mucho todos y todas, pero en los hechos, minga!
Les pasaré a contar algunos ejemplos de los cuales me he visto involucrada en algún momento de mi vida. Primero: cuando estaba soltera y sooolaaa. En ese momento en mi familia era la minoría, para no decir la unicaría. Como si no fuera poco atravesar mi soledad, me sumaban una abuela diciéndome solterona (claro, para su modo de ver la vida, con más de veinticinco y sola, quedabas para vestir santos), el resto de la familia queriéndome enganchar lo que venga. En el casamiento de mi prima Marcela, al que voy sola, invitaron al doble de Luis Miguel para hacer un show. El tipo en un momento pregunta donde estaban las solteras y tuve que soportar el señalamiento unánime de todas las mesas cercanas hacia mi. Eso no es nada, aparezco en el video con "Luis Miguel" a upa mío cantando "no sé tu" o alguna de esas. De postre, la tía Lili, queríendome enganchar a su hijo mayor, unos cinco años más chico!
Segundo: ser vegetariana. Decir que sos vegetariana es sinónimo de decir bicho raro. Ni les explico, si lo comentás en el momento que te invitan a un asado. Y acá, me voy a detener, el asado. Todo un tema. En mi familia, ya están acostumbrados, y me tiran a la parrilla choclos y demás verdura, alguna provoleta más las ensaladas que nunca faltan. Con un grupo de amigos, que no sabían como solucionar este "temita" que tengo, les comenté lo de las verduras y, alegremente, fue implementado con éxito. Entre los amigos y la familia soy la única vegetariana. El tema es cuando el asadito se hace a la romana. Entre mis amigos , todo bien, no me cobran la carne. Pero cuando no conozco mucho a la gente, para que no se rompan la cabeza pensando que le damos a esa chica, me llevo mi comida, que por lo general, son ensaladas que comparto con el resto. O sea, solo genero el gasto de la bebida, pero como tomo agua o jugo, mi gasto es mínimo. En la última juntadita de este tipo, terminé pagando $80'.- por un poco de agua y jugo, un postre y un morrón. La próxima que me cobren la carne, me la meto en el plato y luego en un tapper para Ro! Muchos creen que es un problema, realmente no lo es, pero se esfuerzan ampliamente para hacerlo así. 
Vas a una casa a comprar sandwichs de miga de queso y aceituna, por ejemplo, y hacé de cuenta que le pedís sandwichs de criptonita. Cuando lográs que alguno con buena predisposición te los arme solo para vos, tenés que comprar toda la plancha  y te lo cobran como si el queso fuera hecho con leche de vaca primer premio en la rural. Las pastas? Acá va mi pregunta , porque todas las pastas rellenas de los resto tiene jamón con algo más? ¿Donde vieron que el relleno caprece es con jamón?! 
Tercero: ser mujer e ir a comprar a una ferretería. Este era un evento común, sobre todo cuando vivía sola y ahora también porque soy la que hace los mandados, la que pasea, jajajj...A ver, yo trabajé en mi adolescencia en la ferretería de mi tío Carlito. No atendía generalmente, también hacía los mandados, pero fui aprendiendo cosas. Un tornillo parker no es lo mismo que un philips, los clavos para madera son diferentes a los de pared, las tachas no son iguales a las tachuelas... Hay muchas cosas que no recuerdo, no sé, pero esto no me impide comprarlas , colocarlas y darles uso. Entonces tengo un idioma especial con el que me comunico muy bien con los ferreteros: el idioma del cosito. Yo voy, me plantó en el mostrador y empiezo: necesito una cosita que se pone en la cosa del otro coso. Si el vendedor el canchero y tiene antigüedad en el oficio, me entiende al toque. Tanto en Morón como ahora en Caballito, tengo mis ferreteros de confianza, obviamente son los que manejan este idioma. El tema fue que hoy necesitábamos un coso para el depósito del baño. Le pedí a Ro que me explique y muestre como era y para que servía, para comprarlo. (Porque no se crean que esto es así no más, me instruyo, no es solo ir con el coso del cosito de la cosa!) Cometí el error de ir a una casa de sanitarios, cuando empecé con "un coso"... el tipo se empezó a reír. Me trajo el repuesto, le pregunté si era el único modelo, me dijo que era universal. Volví a casa y cuando quisimos meterlo, no era! Tenía una rosca hembra en lugar de macho. Me fui con el coso recién comprado y el viejo a mi ferretero amigo, ahí me enteré que había dos versiones del repuesto el macho y la hembra y que me tendría que haber preguntado quien me atendió sobre la rosca. Que flojo el sanitarista, me vió mujer e inexperta y me dió cualquier cosa!
Cuarta: ser la única chelista de la orquesta. Del conjunto de los bajos de la orquesta soy la única representante femenina! Dos contrabajistas, dos chelista y yo. Con lo cual, a veces, presencio comentarios bien masculinos hacia otras mujeres, de los que ya a esta altura del partido no me asombro, y cuando les advierto que estoy yo, que aflojen, me salen con "pero vos no sos una mujer, sos uno más de nosotros". A bueno...Lo que me faltaba, que me reduzcan a esa cosa que no es mujer, pero tampoco hombre.

Seguro, alguna vez habrán sido minoría y podrán contar más de una de estas. Hay que hacerle frente a las mayorías aplastantes, ser felices y no morir en el intento.

Hasta pronto...

jueves, 15 de noviembre de 2012

Crónica de un cumpleaños de 15 o ¡como pasan los años!

Hola amigos!
El sábado fue el festejo de quince años de mi ahijada Candela. Una hermosa personita, hija de mi amiga del secundario. Todo el año fue el tema principal, imaginen. Así que no podía faltar. En este momento de la vida, es más común que me inviten a bautismos, nacimientos y casamientos que a cumpleaños de quince, así que era un poco raro... Por lo pronto una horda de adolescentes efervescentes arreglados y predispuestos a mostrarse y hacer pavadas toda la noche. Por otro lado, el típico comentario de vieja al momento de descubrir que esa bestia de metro ochenta bomba sexi era la tiíta de doce años que conocí cuando Cande era bebé.  Ni hablar cuando pasaron las fotos de la cumpleañera maquillada y producida para una sesión de fotos. Debo reconocer que casi se me pianta un lagrimón cuando vi estas fotos...
La fiesta estuvo hermosa, cálida y divertida. La niña super contenta y amosora como siempre. Todos contentos. No faltó mi pedido al fotógrafo de bajar unos añitos con fotoshop!
Ahora, como se nota la diferencia de edad: por ejemplo, yo tengo un sensor de vejez: si estás en una fiestas de estas donde hay música para bailar y tres temas seguido no los podes reconocer o conocer, listo estás quedado en el tiempo. Ni hablar si te mandas los comentarios como los que describí antes, no?
Pero la vejez también te da la madurez y las experiencia. Y acá me voy a detener! Imagen uno: a la hora de empezada la fiestas, todas las chicas que se habían subido a unos tacos impresionantes, estaban descalzas ensuciando sus medias. Noooo, mis queridas, nunca, bajo ningún concepto hay que perder estilo. Nada de bajarse de los zapatos. Nunca ir a una fiesta con semejantes tacos a estrenar, elemental Guatson. Esto se soluciona así: una semana antes desde que te levantas hasta que te acostas te montas en los zapatos. Colgas la ropa, haces la comida, pasas la escoba con los tacos puestos, de esta manera para la fecha, o tenés los pies destruidos o domaste los zapatos. Ah, tampoco vale cambiarlos por unas zapatillas u ojotas de playa.Mientras las muchachas hacían esto, los muchachos se sacaban la camisa de adentro del pantalón, las arremangaban y hasta se ponían la corbata de vincha, NOOOOO. Tendrían que haber aprendido del padre de la cumpleañera que se bancó estoico la corbata apretándole el cuello toda la noche.
Si hay algo que espero en toda fiesta es la mesa dulce. Quieren que les comente como esta horda de jovencitos se avalanzó como fieras a las tortas? Ya no hay respeto! Tampoco voy a contarles como las niñas hacían revuelo en el pasillo del baño con los chicos. Como pasa siempre, a los nabos de su curso ya les conocen las mañas entonces les echan el ojo al primito, tío y demás exponentes del sexo masculino que están repartidos entre las mesas. Pero acá hay que ser cautas, porque se te aparece una madre o novia celosa y listo! No pasa lo mismo con los varones. A esa edad, también les conocen las mañas a las compañeras pero no les da para las tías o primas y siguen insistiendo con las de siempre. Mejor mala conocida...
Lo malo, es que no hubo ramo, ligas ni cintitas, porque me venía bien para apurar a Ro!
Hasta la próxima...

sábado, 10 de noviembre de 2012

Bendito clima

Hola Amigos!
Bueno, que semanita, señores y señoras! Empezó el calorcito. La verdad que me estaba extrañando que todavía estuviere frequito. Otros años, a mediados de octubre ya nos estábamos derritiendo. Es más, mi señora madre, quien goza tener una linda pileta en medio del parque, a la que mantiene casi limpia todo el año, para septiembre ya la tenía en óptimas condiciones y ella con un dorado Caribe que ni les cuento. Pero recién esta semana la limpió este año! 
Mi alergia tampoco se hacía presente, otro punto a favor. Eso de levantarme a la mañana y atajarme la frente para no terminar con la punta del espejo del botiquín del baño o la alacena de la cocina incrustada en ella de algún estornudo, o fijarme de apoyar la taza llena de café con leche antes de bañarme con su contenido en otro de esos.  Si, porque si nunca tuvieron un ataque de estornudos alérgicos, les cuento que es de lo más molesto. Comienzan a los cinco minutos que abrís los ojos a la mañana. Imaginen que todavía no entras en si, que ya te estás sacudiendo a repetición. La cabeza se bambolea al son de los mismos, te lagrimean los ojos, que además de tenerlos chinitos de dormir me quedan más chiquitos de la alergia, te brota agua de la nariz previa picazón que se trasmite a los oídos. Un placer no? Ni sueñen, en estos casos hacer locuras como delinearse los ojos con negro, depilarse las cejas o desactivar bombas. Todas estas acciones podrán verse drásticamente afectadas por una cadena interminable de estornudos. Durante años he intentado mil maneras para reducirlos, pero niente! Lo que me hace sentir mejor es, después del estornudo 15 más o menos, es decir al finalizar cada uno fuerte y claro "mierda". No me los corta, pero me hace sentir de contenta....
Venía zafando de todo esto hasta esta semana que se le ocurrió venirse todo el verano y primavera juntos. El lunes tuve que salir si o si para ir a la facultad. Quieren que les cuente lo lindo que es viajar a zona sur en un colectivo repleto, con el sol a pleno y lejos de la ventanilla? Mejor no, ya se lo pueden imaginar. Cuando llegué no podía ni pensar del calor. En nuestro departamento, tenemos el sol desde el amanecer hasta las 10am aproximadamente. Bueno, el martes me acerqué a eso de las ocho a levantar la perciana del comedor y cuando sentí el fuego del sol entrar, decidí que estaríamos a media luz cuan desayuno romántico hasta que pase la hora. 
Todo se desarrolló en este orden. Mi presión por el piso, mi actitud de energía se traducía a un caracol : me arrastraba con bártulos encima y todo. Hasta desempolvé un abanico que mi tía Irma me había regalado para navidad. En su momento no le vi mucho sentido y ahora no salgo sin él! Que me digan lo que sea: locomía, vieja, gallega, no me importa, yo calor no paso!
El jueves, ya pegoteados, Rodrigo no hacía más que desear lluvia y frío. A mi con el fresquito me alcanzaba. Me puse contenta cuando me levanté el viernes y no estaba la tormenta pronosticada. Tenía que ir a Mercedes todo el día y no daba andar esquivando lluvia. pero el pedido de Ro fue tan enérgico que la naturaleza le dio el gusto. Estaba bajando del colectivo y de repente se hacía de noche. Me meto en el banco y se larga una tormenta de aquellas. Sandy, dige para adentro. Agua, viento, arboles meneandose con una violencia...Los autos haciendo olas desalojando el agua de las calles. Yo tenía un paraguas , pero el viento con que lo atajaba? Cuando más o menos paró, decidí hacer las seis cuadras que me faltaban. Venía bien, hasta que llegué a una avenida. De repente me vi como Mary Popins volando por la ciudad con mi paraguas y mi pollera. Llegué al trabajo con el pelo revuelto, mojadísima, muerta de frío,  esperando que mi ropa se secara con el tiempo. A la vuelta, me morí de frío!! Llegué a casa y lo miré a Ro, me acordé de sus deseos y le dije: gracias!
Hasta la próxima....